Anoche.

Una noche de finales de enero , fuera todo estaba en paz, congelado por el frio y dentro, tu y yo un amor clandestino , en una casa prohibida, a escondidas del resto de la gente , solo para disfrutar del echo de dormir abrazados.Yo iba a disfrutar de que me trataras cual balón mientras soñabas y de tus ronquidos, que en ese momento hasta me agradaban  y tu disfrutarías de que te abrazara a todo lo que mis brazos abarcaban sobre ti, sabia que te encantaba .
Ese día yo te espere impaciente, ilusa como siempre , la espera se me hizo eterna  y aun mas cuando dijiste que no podíamos quedar, hasta que por fin te vi como una bocanada de aire fresco , como un empujón hacia el filo del vacío, como si fuera la primera vez.
Como siempre desarreglado y tu sonrisa bien puesta  y yo que me había puesto guapa para ti. La proxima escena se ubica en el sofa. Un sofa bastante pequeño para tus dimensiones y yo como la guinda del pastel encima tuya , con un arsenal de besos guardados en la trinchera que estaban siendo bombardeados hacia ti  y tu que recibías el ataque con gusto; unas palabras que se clavan , que dejan sin respiración ,hoy una vez mas : porque me das tantos besos? Para cuando no te los pueda dar. Pum y se para el corazon de inmediato y vuelve a escocer la herida. Una respuesta que provoca media sonrisa  y me dice: esa la tenias preparada.Y yo por dentro sabiendo que estaba premeditada. Todo los dias me acuerdo de aquello, porque no cogí en ese moemnto y le quite la pila al reloj y pare el tiempo.