¿Qué que es lo mas
bonito que tiene es lo que me estas preguntando?
La sonrisa, por descontado, bueno y el culo, eso también.
Pero no una sonrisa cualquiera, sino la que pone cuando para
enfrente de tu casa con la música varios decibelios de más , o la que puso el
primer día que me dio el título de copilota, si creo, que me quedo con esa.
Y esa alegría. Esa
que tiene perenne, con la que siempre llega, por muy nublado que este el día, y
sea la hora que sea. Esa que le corre por las venas y con la que le alegra el día
a cualquier persona que viva en el mismo planeta que yo.
Sin contar con ese maletón de planes a cual más absurdo que
inventa solo para verte feliz, porque él
es así, y eso es lo que le hace ser grande. Hace sentir especial a la gente. No
se cómo, pero lo hace y creo que no se da ni cuenta.
Eso y sus incansables ganas de pasar más tiempo del
permitido contigo, hablando de nada y haciendo de todo, en cualquier lugar, no importa,
el caso es disfrutar. Sin importarle los monstruos que guardas debajo de la cama. Porque el tiene su duplex en el pie del cañón , y de ahí no se menea.
Y sus ganas. Eso es lo mejor. Sus ganas de todo. Por muy difícil
que se lo pongan, por muy oscuro que este, que él enciende su mechero y ya
puede arder trolla, porque él es el
corchito que flota en mitad del tsunami, y confía siempre en lo que cree, y se
tira a la piscina sin mirar si quiera si está llena, porque el que no arriesga
no gana y porque si algo esta claro es que hemos ganado al habernos conocido.
Y ¿Qué me dices de esas
ganas que tiene de comerse el mundo? Contigo de la mano por supuesto, como si
todo esto fuera un cuento y él tuviera la pócima secreta.
Y por eso que todo esto se le parece más a un cuento que a
la vida real, él es capaz de hacer magia
cada vez que te mira.
Y por todo eso es tan bonito.
Que yo no sé cómo acabara esto, no tengo ni puta idea de
donde iremos a parar, ni me importa, pero a día de hoy podemos darnos con un
canto en los dientes y brindar por el que invento las casualidades.
