Te he bebido a chupitos, me he enganchado a tu veneno. Al final borracha, envenenada, y derramada en cualquier cráter de la Luna. Qué mejor manera de nombrarte dueño de mis resacas, y coronarte rey de mis monstruos. Aunque siempre me has gustado más encima de la cama o debajo de mí.
No hay comentarios:
Publicar un comentario